El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha aprobado una sentencia que avala la directiva comunitaria sobre el tabaco. La directiva, realizada con el objetivo de disminuir el consumo del tabaco, uniformiza las cajetillas de tabaco puesto que decreta un tamaño y un contenido mínimo para las advertencias de salud. Además, prohíbe el tabaco mentolado y de sabores. A partir del 20 de mayo, las compañías fabricantes tendrán la obligación de mostrar mensajes de advertencia sanitaria sobre el riesgo de fumar que ocupen el 65% de la superficie de la cajetilla y por ambas caras. Además, cada paquete debe incluir advertencias generales y que el tabaco contiene más de 70 sustancias que provocan cáncer. Para amortiguar el impacto de la normativa, los establecimientos que comercialicen dichas cajetillas podrán vender las que tienen el formato actual hasta el fin de existencias.

La sentencia del Tribunal de Justicia de la UE se ha producido en respuesta a la denuncia planteada por algunos fabricantes de tabaco con respecto a la directiva del empaquetado genérico aprobada en 2014. Según la sentencia, la directiva no excede «los límites de lo que es apropiado y necesario». Según la corte, la normativa es proporcionada y no afecta al contenido esencial de la libertad de empresa y del derecho a la propiedad. Además, según señala el Tribunal, dicha prohibición facilita también el buen funcionamiento del mercado interior.